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Crisis económica, 2008 vs. 2020

A continuación se ofrecen una serie de datos económicos de la última crisis financiera y del actual contexto, marcado por la paralización parcial de la actividad económica debido al estado de alarma. Los números son dispares debido a la diversidad de fuentes, pero la mayoría demuestran que los negocios locales llevan tiempo luchando contra adversidades y momentos que no les facilitan su trabajo. De hecho, muchos bajan la persiana para siempre ante la imposibilidad de seguir adelante. 

Los efectos de la crisis económica del 2008

 

“El pequeño comercio de deprime en los barrios de Bilbao”, así titulaba El Correo una de sus noticias un 20 de abril del año 2008, con la última crisis económica causando sus primeros efectos en la población y en todos los sectores económicos. 

 

Tal y como indica el anuario económico de La Caixa del 2007, Bilbao fue la ciudad española que más pequeños comercios perdió desde el año 2000 hasta el inicio de la crisis; 641 negocios, lo que supuso un descenso del 8,5%. En contraposición, encontramos los buenos datos de otras ciudades como Madrid o Barcelona, que obtuvieron unos avances del 3% y el 9,1% respectivamente. 

 

En cuanto a los datos manejados por el Instituto Vasco de Estadística (Eustat), entre el 2000 y el 2006 se perdió un total de 222 negocios minoristas o de proximidad. Esto equivale a un retroceso del 3,4% en el saldo neto, es decir, restando las aperturas de locales a los cierres totales. Por lo que en realidad más de 222 pequeños empresarios tuvieron que bajar su persiana de forma definitiva, tal y como apunta el banco catalán. 

La precarización, entonces, se agudizó en el 2008, pero como se puede observar, venía de largo. 

En este mar de malas noticias, destaca que también según Eustat, en el periodo indicado (2000-2006) se generaron 2.261 empleos más, lo que supuso un aumento del 16%. La superficie de venta creció un 10%. 


 

Crisis prematura en las PYMES

429 cierres en un año 

 

La recesión económica ya se hizo notar en este sector en el año 2007. Entonces 113 pequeños establecimientos de textiles, calzado y confección de piel optaron por cerrar. Muchos de ellos se encontraban ubicados en zonas obreras de la ciudad: Uribarri, Casco Viejo, Zorroza y Rekalde. 

En cuanto al resto de tipologías de negocios, también en 2007 cayeron 102 establecimientos del conocido como “segmento mix”, una cifra muy similar a la anterior. Hablamos de librerías, papelerías, floristerías, tiendas de deporte o incluso joyerías de la capital bizkaina. Cabe destacar que en la mayoría de estos casos la plantilla era más bien escasa; inferior a los cuatro empleados.

Los datos tampoco fueron esperanzadores para los locales dedicados a la venta de equipamientos del hogar y para las tiendas de electricidad. Cerraron 60. Las cifras de Hacienda de Bilbao colocan a estos negocios como los terceros más afectados. 

Por otro lado, 154 pastelerías y despachos de pan y de productos lácteos suspendieron su actividad en Vizcaya. La mayoría de ellos estaban radicados en la ciudad. 


 

El total de 2007

Se trata de un conjunto de 429 cierres en tan solo un año y en una única provincia. Hablamos de 429 bilbaínos a los que les resultó imposible cuadrar sus números justo antes de una importante y desastrosa recesión económica. 

Los únicos barrios con un saldo positivo del 2007 fueron Abando e Indautxu, zonas de rentas más elevadas. 

Cobertura mediática

Los medios de comunicación se han hecho eco de esta situación, que se ha prolongado y sigue vigente en el 2020: 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

La respuesta de la administración

 

Mari Paz Irastorza, responsable -ya por aquel entonces- del departamento de Comercio Interior de la Cámara de Bilbao, declaró para El Correo que el hecho de que las pequeñas y medianas empresas de Bilbao fueran las más perjudicadas se debió a que son también “las que más abundan”. En esta misma línea, Irastorza aseguró en el 2008 que el balance del quinquenio 2001-2006 fue “positivo”. Aseguró que sus datos reflejaban un avance del 2,6% en el comercio local, a la vez que un aumento un del 17% en cuanto a los puestos de trabajo generados. 

Por otro lado, esta responsable pública también recordó que algunos de los negocios cerrados no desaparecieron de forma definitiva, ya que, según dijo, “han comenzado a funcionar con otro tipo de actividades”. 

La crisis que viene

El impacto del Covid_19

Según cuenta el diario especializado en economía Cinco Días (del Grupo PRISA), y basándose en los datos del últimos mes de marzo aportados por la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme), casi medio millón de las PYMES del Estado español temen cerrar de manera permanente a raíz de la limitación de la actividad económica como consecuencia de la pandemia. Dicha cifra supone aproximadamente el 15% de las PYMES registradas por el Ministerio de Economía. También según la patronal de los negocios de proximidad, algo más de un tercio de ellos espera hacer algún tipo de ajuste durante lo que queda de primer semestre del año. Puede parecer un porcentaje poco relevante, pero contrasta con que nueve de cada diez PYMES sí que creen que la inminente crisis acabará afectando de forma “negativa” o “muy negativa” a su negocio. El 88% está convencido de que la economía empeorará. Algo menos, el 70%, tiene previsto pedir financiación. Es el mismo porcentaje que califica sus perspectivas como “malas” o “muy malas”. Según ha explicado Cepyme, el resto de los pequeños empresarios confía en que la crisis será cuestión de algo pasajero. 

De entre las medidas más solicitadas al Gobierno español durante el confinamiento encontramos las ayudas fiscales (82%) y las deducciones de las cotizaciones a la Seguridad Social (69%). En esta misma línea, un 58% vería con buenos ojos ayudas directas por parte del ejecutivo central. 

Motivos para la esperanza

El Barómetro Pyme de la Confederación también señala que el 60% de las PYMES ha manifestado su intención de mantener su empleo este año o incluso aumentarlo, a pesar de las consecuencias negativas del coronavirus. 

Los datos del Banco de España

El Banco de España, por su parte, calcula que el PIB nacional podría caer entre un 6,6% y un 8,7% en el cómputo global del año 2020. Lo ha previsto tomando como referencia que el confinamiento podría durar ocho semanas. Es lo más probable según esta institución.

 

De todos modos, no descarta escenarios más catastróficos. Según ha explicado la entidad, en el caso hipotético de que el estado de alarma dure hasta 12 semanas y no se llegue a la normalidad de la actividad a finales de este año, sobre todo en las ramas ligadas a hostelería, restauración y ocio, el PIB podría caer hasta un 13,6% en 2020. Para encontrar datos parecidos cabe ir hasta la Guerra Civil. 

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